Nada más que decir en esta noche
nada más que entregarte para tí
nada oculto que ocultarte en un reproche,
pero creo que tengo mucho más por decir
no me llames mañana
no te acuerdes de mi otra vez
no te le aparezcas ni a mi hermana,
pero búscame siempre, que te quiero ver
ya no beses mi boca
ya no roces mis manos con tu piel
ya no me llenes de caricias rotas,
pero hazme otra vez enloquecer
ya no te buscaré en mis palabras
ya no me acordaré de tí otra vez
ya no te pensaré por las mañanas,
pero toda la vida te encontraré
ya no enviaré ramos de rosas
ya no compartiré mi chocolate amargo
quemeré ahora mismo todas tus cosas,
pero cada vez que te vea susurraré un te amo
hoy todo se ha acabado
no quiero saber nada más de tu nombre
ahora quiero estar con otro hombre,
pero quiero pensar que sigo a tu lado
digamos que los peros han gandado
en el juego peligroso del adiós
digamos que una vez más se lo ha intentado,
pero nunca digamos que lo nuestro jamás sucedió
ahora se arrepienten nuestras palabras
y las vendemos por esas viejas emociones
que lograron juntar nuevamente al caballero y a la dama
que alguna vez adornaron su cama con traiciones
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